domingo, 30 de enero de 2011

Un lugar mágico



Si tenéis ocasión no dejéis de ir. El último día de mi estancia en Delhi, me comentaron visitar un templo, situado al sur este de Delhi, no tenia idea de lo que íbamos a ver, y he de confesar que me quede sin palabras.

Swaminarayan Akshardham


Se trata de un entrono mágico en un enclave privilegiado, en el que están personificados 10.000 años de cultura indígena en toda su grandeza.

Es un bello lugar que transmite paz, sabiduría, y mucho sosiego. Se respira algo místico y especial, muestra la esencia de la arquitectura antigua de la India, en la que se ha reflejado sus tradiciones y mensajes espirituales.

Se trata de una obra faraónica del siglo XXI y si su belleza impresiona, los números intimidan, todo este complejo se construyo en solo 5 años, financiado por devotos y más de 11.000 artesanos voluntarios que acumularon más de 300 millones de horas trabajadas. Las obras comenzaron en el año 2000 y su inauguración fue el 6 de noviembre de 2005.

El Mandir


Akshardham significa la morada eterna, divina del Dios supremo, la pureza y la paz que prevalece para siempre.

Es un monumento único ya que han querido reflejar todas las facetas a través de exposiciones, exuberantes jardines, proyecciones 3D, atracciones que por medio de muñecos robotizados, fibras ópticas, efectos de luz y sonido diálogos y música, nos muestran los distintos relatos de su religión, transportándonos en una canoa al siglo XVII. Es una especie de parque temático en el que se representa la vida tal y como ellos la conciben. Una experiencia que Sobrecoge e impresiona.


Se divide en varias partes, el templo principal llamado El Mandir es una hermosa estructura construida sin acero, que consta de 234 columnas talladas, 9 cúpulas adornadas, 20 shikhars cuadrangular, un espectacular zócalo de elefantes tallados en piedra y mas de 20.000 estatuas que representan la cultura de este país.

Los materiales de construcción son una fusión de cantera rosa y mármol blanco, donde la piedra rosada simboliza bhakti en la floración eterna y el mármol blanco de la pureza absoluta y la paz eterna.



Si tenéis ocasión no os lo perdáis, ya que no tengo palabras para describirlo.

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